Tucumán ofrece un nuevo atractivo, se trata de «Intihuatana Terraza del Sol«, un espectáculo panorámico único desde balcones y miradores a 150 metros de altura.
Un nuevo parque temático se suma a los atractivos de los Valles Calchaquíes,
Este parque temático se encuentra en el predio del Observatorio Astronómico de Ampimpa, a 153 kilómetros al noroeste de la capital tucumana.
Con el nombre de «Intihuatana Terraza del Sol«, se suma al gran patrimonio cultural y turístico de los Valles Calchaquíes.
Este emprendimiento permitirá a los visitantes de todo el mundo puedan disfrutar de un espectáculo panorámico único desde balcones y miradores a 150 metros de altura.
El Observatorio Astronómico de Ampimpa
El Observatorio Astronómico de Ampimpa, que pertenece a la Universidad Nacional de Tucumán, está ubicado en el Departamento Tafí del Valle, sobre la ruta 307, en los faldeos occidentales de las Cumbres Calchaquíes.
«El parque está pensado en relación a las nuevas políticas nacionales de fomento de las energías alternativas, resaltando el funcionamiento de la energía solar y eólica», explicó el director del Observatorio, Alberto Mansilla.
Agregó que en este lugar «se va a integrar al significado y al uso que los pueblos antiguos le daban al sol como instrumento para medir el paso del tiempo».
Además estará equipado con audioguías portátiles que permitirá que los visitantes puedan acceder a todos los contenidos del parque a través de sus celulares y descargarlos en la memoria de sus equipos.
Cada atractivo estará previsto de un código QR que brindará un acceso al sitio web y a todos sus contenidos, «que lo convierte en uno de los primeros parques temáticos del país totalmente digitalizado», señaló Mansilla.
«Queremos que los visitantes disfruten de los paisajes increíbles que tenemos pero al mismo tiempo vivan el contacto que se da entre las antiguas culturas y las nuevas tecnologías. Es un sincretismo perfecto entre lo antiguo y lo moderno«, resaltó.
Turismo educativo
Por su parte, la vicepresidenta del Ente Autárquico Tucumán Turismo, Elena Colombres Garmendia, sostuvo que esta iniciativa «le suma un valor diferencial al circuito Valles Calchaquíes, asociando nueva oferta con el uso de las nuevas tecnologías, para que cualquier visitante pueda llevarse algo más que los conocimientos a través de la experiencia, sino también material de suma utilidad relacionado con la astronomía y los atributos que los pueblos originarios le brindaban al sol y a las estrellas».
Valoró que «el segmento del turismo educativo, sobre el que desde hace años viene trabajando el observatorio con contingentes de todo el país, es muy importante porque le suma atractivos a ese mercado, y lo consolida».
El Circuito de los Valles Tucumanos
El nuevo parque temático formará parte del circuito de los valles tucumanos, con epicentro en Tafí del valle, lugar apto para caminar o cabalgar entre sus cerros, practicar kayak o canotaje en el dique La Angostura, hacer mountain bike por sus senderos de tierra, conocer sus productos artesanales, degustar sus comidas típicas, y visitar el Museo y Capilla Jesuítico de la Banda que alberga también un mercado artesanal y un restaurante de comidas tradicionales.
Otro sitio destacable es la cascada Los Alisos situada en el centro del cerro Muñoz y La Quebradita -ideal para caminatas, picnics o cabalgatas- que cuenta con un pequeño morro en donde se ubica un Cristo Redentor con dominio de todo el valle y las tradicionales estancias donde los visitantes pueden hospedarse, conocer el proceso de fabricación de quesos.
Siguiendo el cirquito de los Valles Calchaquíes se llega a Amaicha del Valle, que ubicada a 164 kilómetros de la capital provincial y a 2000 metros de altura sobre el nivel del mar, posee uno de los mejores microclimas del mundo y años de tradición.
Una muestra de ello es la bodega comunitaria Los Amaichas, que comenzó su actividad en el año 2011, y fue construida por comuneros que utilizaron el pircado como técnica ancestral de elevación de muros para el desarrollo de los habitáculos circulares interconectados, convirtiéndola en la tercera bodega en todo el mundo que pertenece a una comunidad indígena, y única en América del Sur.
Rodeado por los ríos Tipas y Tacanas y a 1.087 metros de altura se encuentra la villa turística de San Pedro, donde se pueden visitar los yacimientos arqueológicos de Piedra Pintada, que muestra signos tallados por culturas ancestrales en honor a la fertilidad y las cosechas.
Por su parte, San Pedro de Colalao es la reserva Fitozoológica Carlos Pellegrini, donde se puede aprender sobre la vida de más de 150 especies exóticas como tucanes, leones, tigres de bengala y flamencos; y otras autóctonas como zorros, águilas, pumas y tapires, entre otros.