En esta nota te presentamos las mejores Cascadas de La Cumbre para que puedas ir a visitarlas y no te pierdas ninguna.
Una más hermosa que la otra, llegar a ellas representa una hermosa conexión con la naturaleza.
Cascada de la Fronda
A la altura de la entrada a la Estancia La Fronda, se encuentra una tranquera blanca y un curso de agua que baja del Este.
Remontando las aguas de ese arroyo, se llega a la cascada.
El sendero permite avanzar con rapidez y está trazado en medio de un bosque alto.
El arroyo comienza a crecer en caudal a medida que se gana altura y a correr entre grandes bloques que obligan a pequeñas escaladas y varios cruces.
De pronto, se abre a la vista el salto de agua que se desliza por la roca y cae en dos brazos separados.
Se encuentra dentro de una propiedad privada.
En una hora de marcha sostenida se llega al pie de la cascada y se baja en unos 20 minutos a buen ritmo.
Cascada de los 70 pies
Se inicia la marcha tomando el camino a la altura del Hotel Cabor, en Cruz Chica.
A la hora de caminata se abandona el camino ancho y se busca a la izquierda y en una propiedad privada, el sendero de cornisa que se encuentra sobre la falda de la montaña en el valle por donde corre el río Cruz Grande.
Por ese sendero que deja ver unos 300 metros abajo el río, se llega en una hora a la cascada en su parte alta.
Hacia arriba y a la derecha, a pocos metros se encuentra el diquecito de Los Laureles.
Otra de las formas para llegar hasta la cascada es remontar el curso del río Cruz Grande, marcha que se inicia a la altura del llamado “vado del San Pablo” y es la de mayor esfuerzo.
Desde el comienzo la marcha se alterna en una y otra orilla del río.
El curso superior pone delante la necesidad de superar dos saltos con desniveles cortos pero expuestos y que requieren una mínima técnica de escalada y seguridad.
Se presenta luego, un frente que obliga a superar una caída de agua, complicada si esta cae con fuerza y tiene mucho caudal.
Superado este obstáculo se está a 20 minutos de alcanzar el pie de la Cascada de los 70 Pies.
Lo aconsejable, es continuar río arriba unos 300 m hasta cruzar a la derecha el sendero que permite un rodeo cómodo al diquecito y el empalme con el camino secundario.
Por el curso del río Cruz Grande se tiene una marcha exigente de 4 a 5 horas, con sectores difíciles en el curso superior. Se puede bajar por el camino en algo menos de 2 horas.
Cascadas de Cuchi Corral
Desde El Mirador, se sigue a la derecha el filo que busca la quebrada por donde el curso de agua se “descuelga” en siete saltos que salvan 400 m de desnivel que hay hasta el llano y el curso del Río Pintos.
Entre el tercer y cuarto salto es necesario por seguridad el empleo de una cuerda para bajar unos 40 metros y alcanzar un sitio llano y con grandes árboles al pie de la cascada.
Se regresa así al curso de agua y no cesan las dificultades ya que hay que sortear otras caídas de agua destrepando con exposición.
Al llegar al sendero que transita el monte alto, se avanza con rapidez cruzando un sector final que llega al “vado” del Río Pintos.
Desde el camino se regresa a La Cumbre.
La caminata desde el vado hasta el pie de la última cascada no presenta mayores inconvenientes a no ser los de la vegetación cerrada y los cruces del arroyo.
Es un circuito difícil y fuerte que requiere de 5 horas de tiempo, buen estado físico y manejo de las maniobras de descenso.
Es fundamental la autorización correspondiente.