Las abundantes lluvias en Brasil provocaron un aumento del caudal de agua que llega a las Cataratas del Iguazú.
Esto ocasionó que por estas horas se espere un pico de 12.000 metros cúbicos por segundo, seis veces más que lo normal.
Este impresionante fenómeno obligó a la empresa concesionaria del parque nacional a tomar esa medida por razones de seguridad; el último cierre había sido en 2015.
No obstante, el resto de los paseos del Parque Nacional se encuentran habilitados para el turismo
En un dramático contraste con lo que sucedió este verano, cuando las Cataratas del Iguazú se mostraron desnudas y con apenas un hilo de agua.
Hoy la Administración de Parques Nacionales decidió que el circuito de Garganta del Diablo permanezca cerrado al público por razones de seguridad, debido a la crecida extraordinaria del rio Iguazú, cuyo pico máximo sucedió en horas del mediodía del 3 de junio.
Ya desde la tarde del 2 de junio, operarios del Parque Nacional Iguazú procedieron a rebatir las barandas de la pasarela que lleva al espectacular paseo.
La creciente del río Iguazú marcó ayer valores cercanos a los 8.000 metros cúbicos por segundo, según informó al emisora Radioactiva 100.7 de Misiones el intendente de Puerto Iguazú, el biológo Atilio Guzmán.
El mandatario añadió que “a partir de los 6.500 se hace una observación más constante de los valores y a partir de los 8.000 se procede a toda esta operación”.
No obstante la situación, Parques Nacionales señaló que el resto de los circuitos del Parque Nacional Iguazú continúan abiertos al público con normalidad, al igual que todas las prestaciones de servicios turísticos de las áreas de uso público.
El contraste con lo que pasó hace unos años
El peor momento de los últimos años sucedió en los primeros días de la cuarentena, entre el final de marzo y el inicio de abril de 2020, cuando el río Iguazú registró un caudal de 280 metros cúbicos por segundo.
Sin embargo, el peor registro de este siglo tuvo lugar en 2006, cuando la medición fue de 122 metros cúbicos.
El récord se registró en 1978, con 120 metros cúbicos. Según los especialistas, estas variaciones suceden aproximadamente cada 15 años y se originan en la alternancia de sequías y lluvias torrenciales que afectan al cordón montañoso brasileño de Serra do Mar.
En San Miguel, ciudad ubicada en el estado de Paraná 53 kilómetros al norte de Puerto Iguazú, se registraron lluvias que alcanzaron los 250 mm, un 65% sobre la media histórica, según informó la agencia de noticias estatal.
Después del pico máximo, previsto para este mediodía, la Administración de Parques Nacionales evaluará si se vuelve a abrir el circuito o si continua cerrado.
Las Cataratas del Iguazú fueron elegidas en 2011 como una de las siete nuevas maravillas del mundo, en una votación promovida por la fundación New7Wonders, y el 80% de los 45.000 habitantes de Puerto Iguazú, de forma directa o indirecta, viven del turismo que genera su geografía.