Viaje por Santa Rosa de Calamuchita | D2

Así vivimos nuestro segundo día en Santa Rosa de Calamuchita, Córdoba y te lo contamos! Una combinación perfecta entre aventura y relax, seguimos descubriendo todas las actividades para realizar en este destino cordobés… y la gastronomía, nos sigue sorprendiendo! Vivílo como si estuvieras ahí…

Un nuevo día en Santa Rosa de Calamuchita, Córdoba, y  junto al gran equipo de bloggers, fotógrafos y viajeros, invitados por los amigos de Travel Media Argentina, nos preparamos para otra aventura en las sierras. Amanecimos en el complejo Valle del Sol, nuestro hogar en este BlogTrip. Un desayuno con todo lo que te puedas imaginar, y más, nos esperaba en el restaurante «Nona María», y la Nona, presente, con una sonrisa cada mañana. La agenda para hoy estaba completa, sólo había que esperar que el día nos sorprenda… ¿Viajás con nosotros?

Listos para empezar el segundo día en Santa Rosa de Calamuchita, desayunamos con Julio, nuestro guía, y nos contó que íbamos a hacer en esta mañana fresca y un poco nublada. Nuestra primer aventura nos esperaba, así que emprendimos viaje. El cielo comenzaba a despejarse, el sol quería estar presente en este ascenso al Cerro Vía Crucis. 

Un cerro de 800 metros de altura esperaba ser descubierto. A poco de iniciar el trayecto, entre rocas redondeadas, comenzamos a observar las cruces de madera, resguardadas entre vegetación virgen, que señalaban las diferentes estaciones del Vía Crucis. Una tras otra comenzaban a aparecer a medida que el camino se ponía más empinado y rocoso, y el calor se hacía presente. 15 cruces marcadas con números romanos nos guiaron, junto a Julio, en el ascenso. Fuimos ganando altura y veíamos con más amplitud el valle y la ciudad de Santa Rosa de Calamuchita. Las vistas panorámicas se vuelven cada vez más impactantes y conmovedoras a medida que nos acercamos a la cima.

La caminata no es muy dificultosa con el calzado adecuado y agua para el camino. El día ayudó, hacía calor y el viento nos renovaba el aire y nos daba energía para seguir subiendo. La gratificación de alcanzar la cima nos alcanzó a todos y pudimos contemplar los hermosos paisajes del Valle y las cristalinas aguas del río Santa Rosa. Una cruz enorme de madera nos marcó el final del sendero. Desde ahí arriba, donde se encuentra la Cruz Mayor, se ve todo!. Se tienen vistas panorámicas de Santa Rosa, el cauce del río y el lago Embalse de Río Tercero, ubicado al sur. Descansamos en la cima tomando unos mates. Se respiraba aire puro y la tranquilidad de las alturas que nunca falla. La subida nos llevó apróximadamente 30 minutos y la bajada un poco menos. Ya con un poco de hambre, teníamos en mente la próxima parada…

Nos esperaban en la Pulpería de los Ferreyra con una gran mesa y el fuego para el asado en marcha. Este lugar, ubicado sobre la calle Libertad, en pleno centro de Santa Rosa de Calamuchita, es uno de los favoritos. Hace 29 años abrieron sus puertas y siguen convocando tanta gente como el primer día. Tuvimos el placer de conocer a Carlos y Aye Ferreyra, padre e hija nos recibieron y nos contaron un poco la historia de la Pulpería. Para las fechas patrias, como el 25 de mayo o el 9 de julio, invitan a los comensales a vestirse de gala para ser parte de una fiesta de época. Hasta carruajes en la vereda dicen! Habrá que volver para estas fechas y comprobarlo, de paso comemos una vez más en este histórico lugar.


La comida empezó a llegar a la mesa. Panes caseros, salsitas y hasta empanadas de carne cortada a cuchillo y choclo, nos sorprendieron en una entrada que se hizo desear y que todos estábamos esperando después del gran ascenso al cerro. El plato principal, asado. Los braseros de mesa no tardaron en llegar, y en ellos, una carne tierna y jugosa. Un manjar! Comimos mucho y delicioso. Tomamos un vino de la casa que nos hizo entrar en calor rápidamente. Llegó el postre y no nos podíamos negar. Flan c
asero con dulce de leche,
que después de 5 minutos, no había más rastros en ningún plato. Un éxito.

Justo enfrente de la Pulpería de los Ferreyra, una de las edificaciones históricas más representativas del pueblo. La capilla Santa Rosa de Lima, construida por los jesuitas en el año 1784 y refaccionada un siglo después. Con el transcurrir del tiempo, fue cambiando de dueños, y en el año 1877, su nuevo propietario, el Sr. Estanislao Baños, decide reformarla, donando a su vez una porción de los terrenos aledaños para favorecer el asentamiento de trabajadores y fieles en el lugar. Por eso, la Capilla Vieja le da inicio al pueblo y es un símbolo tan importante en la ciudad.

Así comenzamos el City Tour, con Lorena de la Secretaría de Turismo de Santa Rosa de Calamuchita, conociendo un poco más la rica historia de Santa Rosa y sus lugares destacados. Caminando por sus calles observamos cómo se conserva intacto parte de su pasado histórico. Conocimos el casco histórico con la Estancia de los Estrada, paseamos por el balneario Santa Rita y por el Puente de Hierro, testigo silencioso de grandes crecidas. Al cruzarlo tuvimos una sorprendente vista del río, de la vegetación que bordea el cauce del mismo y del cordón de las sierras. También conocimos el Puente Colgante, una construcción suspendida sobre el río Santa Rosa, que se convierte en un mirador desde el cuál podemos disfrutar unas hermosas vistas panorámicas de los paisajes serranos.

Por último, visitamos el Mirador El Balcón, muy accesible, y con hermosas vistas de Santa Rosa de Calamuchita y descubrimos el Antiguo Calicanto, sumergido en un paisaje de película. Construido inicialmente con materiales del lugar: piedra, cal y ladrillos elaborados artesanalmente. Un puente acueducto que atraviesa el Arroyo Seco en un camino ideal para hacer trekking o mountain bike. Sentimos por un momento que estábamos en otro lugar del mundo… un aire de otros tiempos.

Después de la gran caminata por la ciudad conociendo tantos hermosos lugares, nos esperaban en el Spa Caricias de Sol, dentro del complejo Valle del Sol, para mimarnos un rato con tratamientos faciales, una pileta climatizada y masajes relajantes. Un lujo.

El spa es realmente completo, invita a relajarse y disfrutar de la amplia variedad de tratamientos que ofrece, con atención personalizada. Música suave de fondo y aromas naturales que nos sumergieron en un estado puro de relax. Quedamos como nuevos después del masaje descontracturante y listos para una nueva aventura gastronómica.

Una vez más el lugar fue el centro, sobre la calle libertad, la más concurrida y transitada en temporada alta. El menú para esta noche: pizzas! Visitamos la pizzería Da Vinci, un clásico de Santa Rosa de Calamuchita. Un lugar enorme, con muchísimas mesas que ofrece las mejores pizzas a la piedra y gigantes. La de tamaño estándar tiene 12 porciones, en vez de 8. En verano, el promedio de pizzas que se sirven es de 600 por día y cuando la probamos nos dimos cuenta porqué. Una variedad de gustos llegaron a nuestra mesa y quisimos probar todas: rúcula, morrones, jamón, un despliegue de sabores que no nos queríamos perder. Las más elegidas son la pizza Da Vinci, con panceta, huevo, tomate y muzzarela y la Ojo de Búho, con papas fritas y huevo frito, una bomba!. Todo acompañado por una rica cerveza, quedamos felices. Conocimos al maestro pizzero que nos dejó conocer el detrás de escena. Nos hizo un show lanzando la pizza al aire con mucho estilo y todos los comensales aplaudieron y pedían otra!

Así terminamos la noche, una vez más panza llena, corazón contento… a descansar al complejo Valle del Sol y renovar energías para disf
rutar el último día del blogtrip. Nos dejamos sorprender por los encantos del valle y de la ciuidad y por su gran oferta gastronómica. Veremos con qué nos sorprende Santa Rosa de Calamuchita para nuestro último día!

Mirá :: Viaje por Santa Rosa de Calamuchita – Día 1 ::

Mirá :: Viaje por Santa Rosa de Calamuchita – Día 3 ::

Fotos: TripInArgentina

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